13 de noviembre de 2013

Me ves.


Sigues a mi vera, atraviésame con tu mirada que yo haré lo mismo.
Dos piezas de un sólo mecanismo.
Eres arena, la enhorabuena de un sol radiante que no me quema.
Una sonrisa extrema, mil bromas,
miradas cruzadas que hablan mil idiomas.
Verme reflejado en otra cara es lo más cerca de un milagro que jamás he estado,
mis miedos y miserias, mis torpezas y sonrisas solo para ti las abro.
Aunque sé que si intento esconderlas puedes verlas de todos modos,
porque me lees, y acaricias mis aristas, 
porque me ves, sin usar la vista.